viernes, 28 de enero de 2022

El pensamiento “guerra relámpago”

 

                     

Dicen que el tanque de combate revolucionó el modo de hacer la guerra. Y sí es cierto que esa revolución está asociada al tanque; no lo es tanto por la aparición del vehículo, sino por un nuevo modo de usarlo.

El tanque ya existía desde la Primera Guerra Mundial. Operaba como un parapeto móvil para la infantería que avanzaba contra las líneas enemigas. Ofrecía cobertura ante el fuego de ametralladoras y luego aplastaba alambres de púas y defensas livianas.  Avanzaba lentamente y detrás la columna de infantes lo acompañaba hasta llegar a la trinchera e iniciar su asalto. El trabajo del tanque terminaba ahí.


Tanques usados en la Primer Guerra Mundial

 

Carlos Enrique Olmedo, militante de las Fuerzas Armadas Peronistas, decía: “los fierros pesan, pero no piensan”. El tanque ya existía en 1939.  Es un pensamiento nuevo el que revoluciona. El objeto “tanque” no revolucionó nada en sí. Un pensamiento nuevo respecto del tanque es lo revolucionario. Los aliados lo llamaron blitzkrieg; la guerra relámpago.

 

2        La energía cinética

 

La energía cinética es la que tiene un objeto cuando está en movimiento. Cuando se quiere detener un objeto que se encuentra en movimiento es necesario aplicar una energía negativa que contrarreste el valor de la energía cinética que dicho objeto trae. La fuerza negativa debe ser igual o mayor de la que trae el objeto en movimiento. 

Para poder entender, de modo llano, que es la energía cinetica tenemos que pensar qué pasa con los objetos que están sueltos en la cabina del automóvil en caso de choque. Estos pueden llegar a pesar 40 veces más cuando el auto choca a 50 km/h. Un bolso de 5 kilos tendría una fuerza de impacto de 60 kilos y un celular se proyectaría con una fuerza de 1,5 kilos. En un choque a 60 km/h el peso de cada objeto se multiplica por 56. Por ejemplo, una maleta de 10 kilos pasaría a pesar 560 kilos, el peso de una vaca.

Esta es la formula para calcular la energía cinética:

 


   La unidad de medida es el joule.

Un auto de 1300kg que alcanza una velocidad de 100 km/h desarrolla 489.739 joules. En el cuadro lo comparo con los tanques Panzer I y Panzer II. Estos tanques fueron la fuerza principal que invadió a Polonia en 1939. 

 

Objeto

peso

velocidad

joules

auto

1,3 tn

100 km/h

498.739

Panzer I

5,4 tn

50 km/h

521.667

Panzer II

8,9 tn

40 km/h

549.273

 


                                    Panzer I


                                    Panzer II

Los tanques que desarrolló Alemania durante la guerra superaron ampliamente al panzer I y II. La culminación del poderío blindado teutón fue el Panzer VI, apodado Tiger.

                


                                    Panzer VI

Producido entre 1943 y 1945, pesaba 57,8 tn y alcanzaba 45 km/h.  Les dejo a ustedes el cálculo de la cantidad joules desarrollados por el blindado a toda velocidad en una ofensiva.


           Septiembre de 1939, Polonia

Inglaterra y Francia habían firmado un pacto con Polonia: le ayudarían en caso de guerra con Alemania. Los aliados calculan que Polonia podría aguantar un año en una guerra de trincheras; tiempo suficiente para movilizar tropas y organizar una contra ofensiva.

Lo que se espera en las líneas defensivas polacas es un ataque al estilo primera guerra mundial. Es decir, primero una preparación de artillería, y luego un asalto de infantería, quizás apoyada por algunos autos blindados. Estos autos blindados no sugieren nada nuevo estratégicamente; van a la cabeza de la columna de infantes, haciendo fuego y prestando cobertura. Los infantes de vanguardia estarán armados especialmente con lanzallamas y granadas. Luego seguirá la infantería regular a punta de bayoneta.

Para defenderse, los polacos cavan trincheras. Ametralladoras y fuego artillero directo intentaran neutralizar el asalto. Donde haya caminos se reforzarán las defensas con cemento y algunos cañones ligeros de apenas 35 mm.

Por esos caminos se van a lanzar los panzer I y II a toda prisa. No se van a detener a tomar prisioneros, ni a limpiar bunkeres y trincheras. Sencillamente pasaran arrojando metralla a 40 o 50 km por hora, aplastando todo a su paso. Y nada que haya en su paso espera tremenda envestida. 3470 panzers I y II invadieron Polonia.

Esas columnas de tanques irán directo al corazón de la retaguardia polaca. Golpearan las líneas de comunicación, los cuarteles generales y los depósitos de suministros. Las columnas de blindados llegaran a la retaguardia antes que las malas noticias del frente. Esto significa la guerra móvil: separar el tanque de la infantería y largarlo a toda velocidad por una carretera. Polonia se rinde luego de un mes de combates.


      Tanque aplastando un caños de 35 mm.

 

5            Modernización de la guerra

La blitzkrieg forma parte de un proceso general de la época: la modernización científica e industrial. El saber científico académico se cruza profundamente con el aparato militar-industrial. Los científicos se vuelven insumo vital del pensar y hacer la guerra. Los necesitan para colocar aparatos de radio en los vehículos militares, principalmente en los de comando y dirección. Para desarrollar una comunicación fluida con una fuerza aérea que pueda apoyar a esos vehículos. Para diseñar y producir radares que le den a la voluntad militar unos ojos que vayan más allá del horizonte. Pero estos temas son para desarrollar en otros textos.



                Blindado alemán de comando con antena de radio

 

viernes, 21 de enero de 2022

La esencia y el grado cero de las imágenes de la guerra

 

Una alianza exitosa

La inteligencia humana se sirvió de lo que el mundo le ofrece, por medio del proceso analógico, para poder imponer su voluntad, sobre el mundo, y sobre otros humanos.

Y si me preguntan que quiero contar con esta serie de imágenes sobre la guerra, no es tanto el valor histórico, ni el repaso de las notas técnicas, sino que busco mostrar como en la modificación de algún procedimiento, o un nuevo uso de una herramienta conocida, o la invención de una nueva herramienta, una voluntad se impone exitosamente sobre otra, o sobre el mundo.



Y la esencia de ese movimiento que voy a rastrear en la historia bélica, lo encuentro, acabadamente presentado en una asociación simbiótica que se dio en un momento de la historia de la vida. Asociación simbiótica exitosa, que aún hoy lo es; luego de 2.000 millones de años.

Resulta que entonces existían dos seres vivos, la mitocondria y la célula anaeróbica. La mitocondria era capaz de producir grandes cantidades de energía, sin demasiado costo. Pero era extremadamente débil frente a los depredadores. Relativamente pequeña y sin defensas era presa fácil. Por otro lado, existía la célula anaeróbica, mucho más grande, y con un poderoso entorno citoplasmático que la protegía. El problema era que esta entidad celular poseía un mecanismo lento y tortuoso de conseguir energía. ¿Qué pasó?, ocurrió una simbiosis, la mitocondria de alojó dentro del citoplasma celular y allí encontró protección. A cambio la mitocondria proveía de un nutrido flujo de energía a su hospedador. Aquí nace la respiración celular, tan exitosa que es hasta hoy la forma más efectiva y eficaz de producción energética a nivel celular.

                            mitocondria

 

Reloj mitocondrial

Esta asociación está inscripta en el material genético, y por fuerza evolutiva, se viene copiando y replicando esa información en el ADN. Hace 2.000 millones de años se replica, y no de modo perfecto. Los científicos calcularon la tasa de accidente mutante en la réplica del material genético. Digamos que cada x cantidad de años ocurre una mutación. Por ejemplo, cada 30.000 años. Entonces, cuantas menos mutaciones presentes, más cerca se encuentra ese ser vivo, en la cadena evolutiva.

Este hecho tiene efectos realmente importantes. Políticos, primeramente, pues cuando aparecía esta teoría se lograba desarticular definitivamente las pretensiones cientificistas del racismo; que postulaba la existencia de distintas razas humanas. La teoría del reloj mitocondrial demostraba la existencia de una única raza humana, la homo sapiens. El racismo no pudo sostener desde allí una argumentación científica.



También permitió establecer el origen geográfico de la aparición del homo sapiens, y sus distintos movimientos poblatorios. Y mas allá del genero homo, se escribió un detallado mapa del árbol evolutivo de los seres vivos; permitiendo establecer distancias precisas entre las grandes familias y ramas evolutivas.

 

Era del Bronce

Esa asociación vital, entorno de la respiración celular, concentra el movimiento que quiero recuperar y traer al texto. Piensen el siguiente ejemplo, existe una especie de mito en torno de la aparición de la aleación de bronce. Cuenta la historia que existían dos ciudades estado que habitaban un gran valle fértil, rico y poblado. Una de estas ciudades tenía acceso al cobre y la otra al estaño. En alianza política decidieron fundir sus metales y hacer bronce. Con ello fabricaron puntas de lanzas y armaduras, y también, monedas. El bronce no es hierro, ni oro. Pero permitió tener puntas de lanzas y monedas mas duras. Alianza militar y económica exitosa que resulto en una dominación permanente del valle.







 

 

Grado cero

Hace 16 millones de años, 1.984 millones de años después de la asociación mitocondrial, existió un continente africano muy distinto a como lo conocemos. Un extenso bosque frutal lo cubría de costa a costa, llovido por húmedas corrientes que provenían del océano atlántico. Pero resulta que en un momento ocurrió un evento geológico mayúsculo. Emergió el monte Kilimanyaro, en el seno del continente. Esa barrera montañosa provocó alteraciones climáticas irreversibles.

Los vientos que provenían del océano atlántico van a chocar contra la cadena montañosa, descargando en la ladera occidental toda su humedad, y pasando del otro lado seco y caliente.

El extenso bosque frutal del lado oeste, se convirtió en selva por el exceso de humedad, y el lado este se secó, y se abrió paso la sabana.


                                            bosque frutal


                                    sabana
                                 

Es para otro capítulo contar qué paso con esos monos que vieron achicarse los extensos montes frutales y en su lugar, el surgir de la sabana, menos rica en alimentos.

Quiero contarles una historia que sucede del lado oeste del Kilimanyaro, que resultaría a la postre el lado selvático.

                                 Proconsul

Del lado oeste, la conversión de bosque frutal en selva, no alcanzó el nivel de estrés de la sabana, pero puso en peligro el abastecimiento de grandes manadas de monos, los procónsul. 

El procónsul es una especie extinta, llamada así por que fue el antecesor común del mono y el homo. Cónsul era el nombre de un mono del zoológico de Londres. Entonces cuando los arqueólogos encontraron restos fósiles de este espécimen, lo llamaron pro cónsul, antes de cónsul, el mono del zoológico.

La manada de procónsules fueron los testigos de esta conversión del bosque frutal en selva, y tuvieron que moverse cuando los recursos frutales de su nicho ecológico se agotaron.

Una madrugada cualquiera, los machos del clan A se acercaron sigilosamente al monte frutal que pretendían conquistar. Lo hicieron por tierra para evitar hacer ruido excesivo y poner en alerta a los atacados. Cubiertos por la neblina de la madrugada llegaron hasta donde no podían ser detectados, de pronto se dividieron en dos grupos. Unos asaltaron la copa delos árboles y cayeron sobre los centinelas del clan b. Los otros, los de tierra comenzaron a aullar y hacer bullicio con palos y arrojando frutos, soretes y piedras. En medio del caos, hembras y crías gritaban, los machos de la manada A fueron implacables.



La manada B fue disuelta, algunos adultos heridos quedaron tendidos en el campo de batalla, y algunas crías también fueron alcanzadas, destrozadas y comidas por los asaltantes. se consagraban vencedores, compartiendo la carne y sodomizando a los moribundos.



Pocas veces los monos comen carne. Este es uno de los casos. La ingesta de alimentos ricos en proteínas y grasas va a definir un camino evolutivo en los primates. Ello los traerá hasta el género homo, pasando por los Australopitecos.

sábado, 15 de enero de 2022

Laburar y deambular vs hacer la temporada y remarcar

 https://www.infobae.com/sociedad/2022/01/13/pinamar-turistas-impidieron-que-la-policia-le-quite-los-churros-a-un-vendedor-ambulante-e-intervino-el-intendente-martin-yeza/

TRABAJAR DE VACACIONISTA

 Llegamos de vacaciones, pero seguimos con la lógica laboral. Seguimos trabajando de vacacionar. Las vacaciones son sometidas a un régimen productivista de "hacer rendir". Ya no en términos puramente laborales o económicos, sino de goce. El trabajador vacacionista sigue en continuidad con el taller, la fabrica, la oficina o el comercio. Pero ahora su mision es producir beneficio en goce. 

Al trabajador vacacionista se lo ve montado en una línea de ensamblaje diario vacacional, con horarios, rituales y ritmos regulares. En su cara se ve que no quiere seguir trabajando pero en lugar de escapar del circuito económico/productivo e ingresar en verdaderas vacaciones, permanece en los senderos en continuidad con las practicas anuales. 

La otra noche fuimos a la playa a ver las estrellas y a escuchar el mar. Las gentes mientras tanto trabajaban de gozar en los locales de comida, en la peatonal, en los bazares, en la feria jipi. No había casi nadie en la playa, increíble. Y los pocos que estaban, a pesar de la luz de la luna, caminaban alumbrando con su celular. Como  si no pudieran ir a la orilla sin soltar el dispositivo pantalla que los baliza. Van hasta el borde del dispositivo aferrando la boya que los geolocaliza en el entramado productivo. Con sus linternas prendidas, con sus GPS encendidos, con sus "redes sociales" activas.



Entonces dejamos nuestros trabajaos allá, pero seguimos trabajando. Ahora trabajamos de vacacionar. Pero éste habito puede ir aflojando con los días, a medida que se deja absorber uno por el entorno que es contorno, que es orilla. Esa triple frontera entre el mar, el cielo y el continente, o sea la playa, podría lograr horadar la alienación laboral vacacionera. Quizás el hedonismo de los limites, de los cuerpos semi desnudos, del murmullo permanente de las olas; y el abrazo, sin pausa, estival,  de la atmosfera costera pueda diluir esa pasión alienada del rendimiento permanente. De todos modos, éste "dejar de trabajar" no está asegurado.

Otro tema que he notado es el nivel de frustración que producen éstas vacaciones. Se montan sobre ellas unas expectativas desmesuradas, lo que deben ser, o lo que deben provocarnos. Medio año fantaseando con ellas, y cuando estamos en el lugar, no podemos dejar la oficina, el taller o el comercio. Por lo tanto no se produce el descanso, ni mucho menos toda la sarta de fantasías reparadoras que le pedimos. Nuestras vidas siguen siendo las mismas pero fuera de los lugares de confort que dejamos al partir; lo cual agrava las cosas. 

Las vacaciones deberían, o bien, no ser un momento de trabajo en absoluto, o bien un momento de cierto trabajo interno; o quizás las dos cosas. No trabajar de ningún modo en el sentido del rendimiento económico o de goce; y al mismo tiempo, un momento de trabajo interno, donde endurecernos, o volvernos mas tiernos (cada cual sabe que necesita). 





miércoles, 12 de enero de 2022

HACER LA TEMPORADA Y CORRIDA DE PRECIOS




Estoy en el chino del pueblo costero. Llevo una bolsa de carbón: "$290" me dice la cajera. Se corrige "No para, $320!!! en la cara10% de aumento. 

Voy al bazar playero, delante mío una señora compra regalos de reyes. La vendedora se confunde los precios, no se los sabia. Agarra el celular  y meta llamar a alguien que le pasa los nuevos números. Y cada vez que la clienta le pregunta cuanto cuesta algo, del otro lado del teléfono, ZAS!!!  

Otro día. Voy al super. compro un repasador. En la caja delante mío una chica con un mate. Pasa el mate y no sale el precio, pasa el repasador y no sale el precio. ¿Cómo se llama la obra? están tocando tanto los códigos que el sistema de escaneo de las cajas se cae. Salgo del super y paso por un bar. Pido un volante. En casa quiero ver la carta con el código QR: no anda. ¿adivinen porque? porque están cambiando los precios.



Contaba el otro día la alegría de los vendedores ambulantes por la buena temporada. Es muy fuerte ver el contraste con la actitud de los comerciantes locales. La ambición desenfrenada de unos y la alegría satisfecha de los otros.   

Obvio que no digo que todos los comerciantes son avaros y todos los laburantes son buenos. De echo conversando sobre ello me señalaban que los laburantes no tienen la posibilidad de modificar directamente su sueldo, como sí la tienen los comerciantes con los precios. 



Sólo transmito impresiones. Veo a unos crispados, avaros, tratando de pescar hasta el ultimo peso. Y veo a otros, vendedores, mozos, cocineros, conductores, etc... alegres, satisfechos, porque esta funcionando, porque hay mucha gente, porque gastan...

Sólo eso, crispación, avaricia e inflación; versus alegría, satisfacción y laburo



domingo, 9 de enero de 2022

El saber: sistemas abiertos y dinámicos

A mediados del siglo XX, en el campo del conocimiento, vemos nuevas disciplinas que comprenden los sistemas dinámicos: la cibernética y la ecología cultural. 
Respecto de la primera, Reynoso la considera dentro de las “teorías o modelos sistémicos” (...) “por su énfasis en los fenómenos dinámicos, en los universos totales abiertos a su entorno, en los procesos complejos y en las interacciones fuertes”. La cibernética fue propuesta por Norbert Weiner hacia 1947”[XXIII]


El otro antecedente es el enfoque ecológico. “Después de la Segunda Guerra Mundial se comprendió que no son las especies como tales las que constituyen las unidades de supervivencia, sino los sistemas de especies, en el contexto de un medio ambiente. Este es, en síntesis, el modelo ecosistémico, elaborado en ecología humana y animal por Howard Odum, R. Margalef y otros autores”[XXIV]



Este enfoque, en el campo de la antropología y la arqueología, inaugura la pregunta: Cómo funcionaban las culturas vivas, más allá de la impresión estática que se habían hecho los arqueólogos hasta entonces. Además se hace evidente el hecho que “las culturas no se relacionan simplemente unas con otras, sino también con el entorno. Steward bautizó con el nombre de “ecología cultural” al estudio de los modos en los que la adaptación al medio puede motivar el cambio cultural”[XXV]

En arqueología el caso paradigmático fue la “importante excavación de Clark, de Star Carr, en el noroeste de Gran Bretaña, a principios de la década de los 50, demostró el gran volumen de datos que se podía extraer”[XXVI].



En definitiva, a mediados del siglo XX se da un pasaje en el modo de conocer y producir conocimiento: de la Historia al Sistema. Las preguntas, que a partir de ahora van a orientar el pensamiento, cambian. La pregunta sobre el origen es reemplazada por: ¿Cómo funciona?; ¿Cuáles son las leyes del funcionamiento? 


Este nuevo modo de conocer tiene efectos sobre el modo de concebir el tiempo que se conoce. Contempla la suspensión del tiempo histórico para que tenga lugar el tiempo lógico. El tiempo del sistema, o de la estructura, es un tiempo no-histórico, plegado a la dimensión sincrónica. 

Acceder a este tiempo novedoso es la puerta de entrada a un nuevo objeto: los sistemas. Una característica novedosa de estos nuevos objetos es el carácter dinámico, de feedback, o retroalimentación con el entorno. Un ejemplo paradigmático de ello es el desarrollo de los termostatos.



Este nuevo modo de conocer, las nuevas preguntas, los nuevos objetos, impactan directamente en la tecnología; y ello directamente en el modo de pensar y hacer la guerra. En el siglo XIX se funda una fructífera relación entre el campo de la guerra y el de la ciencia. Pero durante el período que abordamos, (que llamo de la modernización) este vínculo se estrecha aún más, puesto que la ciencia en muchos aspectos se profesionaliza, al mismo tiempo que se vuelve orgánica del aparato militar industrial. En adelante la guerra, como nunca antes, va a ser el motor del progreso de la ciencia y de la técnica. Y al mismo tiempo, todo ese nuevo saber es refractado hacia otros campos disciplinarios.

Durante principios del siglo XX era común la construcción de cronologías relativas, sobre la base de los extendidos estudios estratigráficos realizados hasta entonces. Pero en 1945 ocurren por primera vez las secuencias cronológicas absolutas gracias a la datación por radiocarbono. “La medición absoluta del tiempo mediante métodos científicos es sin duda uno de los grandes logros de la investigación interdisciplinar. Fundamentalmente se trataba de combinar la física y la química con la arqueología. Willard Libby fue el primero que desarrolló con éxito la técnica del radiocarbono, justo antes de finalizar la guerra. Su trabajo fue recompensado con un Premio Nobel en 1960”[XXVII]. A partir de ahora los arqueólogos podrían datar cualquier objeto sin necesidad de recurrir a complicadas cronologías comparadas de culturas datadas por métodos históricos.



Otro caso notable, de relación estrecha entre los campos del conocimiento y el de la guerra, es la ya mencionada cibernética que se “concibió poco después de la Segunda Guerra mundial, en relación con el control y la corrección del tiro de los cañones antiaéreos”[XXVIII]. A través de la operación de feedback, o retroalimentación, el sistema de tiro lograba auto corregir el disparo haciendo que “los efectos pasaran a formar parte de las causas”[XXIX]




Otro ejemplo: se trata de “una invención capital. En 1935, el Ministro del Aire de Inglaterra había preguntado por el rayo de la muerte, para ver si era imaginable utilizarlo contra bombarderos enemigo. Watson Watt, del National Physical Laboratory, le respondió que el rayo de la muerte no era realizable bajo esa forma, pero , en cambio, que no era imposible detectar un avión fuera del radio de la vista humana, gracias a la reflexión de las ondas electromagnéticas en la ionosfera, De esa respuesta nació la Radio Direction Finding, que cambiara sus iniciales RDF, por el nombre de RADAR“[XXXI]. La lista es larga, a vuelo de pájaro podemos mencionar la fisión nuclear, la cohetería y el motor de propulsión a chorro para aviones. Estas invenciones son producto de la relación simbiótica y estrecha que se instituye en el complejo militar industrial.



El efecto que tienen el radar y el sonar en el campo bélico es similar al efecto que producen la aparición del método hipotético deductivo en el campo de la filosofía de la ciencia. Pero argumentar sobre cómo la guerra produce una abstracción del campo de batalla es un poco más difícil que hacerlo en el campo del conocimiento. Veamos los antecedentes:
En la batalla de Sadowa, en 1866, el ejército prusiano realizó una gran innovación. El tren movilizaba las tropas y el telégrafo movilizaba las órdenes. Así se expande el campo de batalla. Y ya no habrá Gran Comandante que se encuentre en el campo de batalla dirigiendo. Ahora el que manda lo hace desde afuera del teatro de operaciones. Von Moltke lo hacía detrás de un mapa en el cuartel general. En éste ejemplo ya encuentro cierta abstracción del campo de batalla. 
Pero no es hasta la aparición del radar que se funda un espacio nuevo dentro del campo de lucha. La zona de conflicto es alterada, por lo menos en dos sentidos: uno, se le agrega una variable radicalmente nueva: la velocidad (ya lo vimos con la guerra móvil); por el otro, se duplica en un espacio abstracto, proyectado sobre el espacio aéreo, pero que no es el espacio aéreo mismo, sino una virtualidad producida por una máquina llamada radar. Ese espacio radárico se superpone sobre el viejo campo de batalla.
El radar es a la lógica de la guerra lo que la Teoría General de los Sistemas, o el método hipotético deductivo es a la ciencia. Es decir, lo empírico, lo puntual, lo particular, deja de ser la piedra de toque para pensar. Antes de la aparición del radar los ejércitos sólo podían avistar aviones enemigos con la visualización desde tierra, en puestos de avanzada. A partir del radar el enemigo es un punto en una pantalla.




La abstracción del espacio de verdad ocurre también en la arqueología. Lo vemos respecto de la polémica entre historia cultural y la Nueva Arqueología, donde la primera ve sólo un objeto arqueológico, un punto, la segunda ve todo un espacio, totaliza el volumen que rodea al objeto. La Nueva Arqueología, a partir del objeto empírico logra la explicación del sistema de prácticas que hizo uso de ese objeto. La totalización significa, en éste, caso desplazar la atención puesta en el objeto, para ponerla en las conductas que hicieron uso de él. Y también podemos ver cómo en la Arqueología, al igual que en el arte de la guerra y la epistemología, aparece la dinámica y la movilidad: ya no la descripción exhaustiva del objeto hallado sino el estudio de una cultura hipotética viva, versátil, fluyente, contrario a la cultura material del historicismo.

Este periodo que va desde la segunda guerra mundial hasta la crisis del petróleo a principios de la década de los 70, la llamo modernización. Aquí repasamos brevemente la modernización en el campo de la epistemología, la guerra y la arqueología.